ANTES DE DORMIR

ANTES DE DORMIR

Antes de dormir,
de que Morfeo nos invada
y nos haga reposar
en el lecho de plumas de nuestros sueños,
antes de que el velo de tus ojos
oculte las estrellas palpitantes
que encierras en tus pupilas,
necesito que me derritas
con una mirada apasionada,
con un deseo mudo,
con un suspiro frenético.

Antes de dormir
quiero resbalar
por las húmedas dunas de tu cuerpo,
sintiendo la dureza de tus pechos contra mi carne,
el tacto a terciopelo de tu piel,
las caricias de ángel de tus manos en mi espalda,
el abrazo firme de tu piernas sobre mi cintura.

Antes de dormir
quiero poder besarte una vez más,
con dulzura y mimo,
sin tiempo,
sin prisas,
que chapoteen nuestros labios
con ese lenguaje que sólo tú y yo entendemos,
que nuestras lenguas
tejan las vestiduras de la pasión más tierna,
que nuestros cuerpos se agiten en rítmica gimnasia
mientras el arrullo del río de nuestros fluidos
resbalando por nuestra piel
resuena a modo de sinfonía,
una banda sonora
singular y única a nuestro momento de pasión.

Antes de dormir
necesito perderme
en la pasión flamígera de tu corazón,
en el llanto silencioso del placer extremo,
en el estallido extático del placer
cuando estremece nuestros cuerpos
como marionetas agitadas por corrientes eléctricas,
abandonarme a la lasitud
sobre el campo perlado de rocío de tu cuerpo,
besando los charcos de salino sudor de tu piel,
derramándome en tu seno,
mirarte una vez más y,
en el silencio de la noche,
roncos de nuestro ávido deseo,
abrazarme a ti
y perderme en los susurros de los sueños.

© Copyright 2014 Javier LOBO