DESPACIO

DESPACIO

No cierres los ojos,
que quiero verme
en los espejos de obsidiana
que escondes tras las cortinas de tus ojos,
que necesito poder contemplarte
en toda tu magnitud,
en todo tu esplendor.

Me moveré más despacio,
seré sigiloso,
mientras me deslizo más despacio,
entrando y saliendo de tu cuerpo,
mientras veo cómo se dibujan
los ríos de tus arterias
bajo la delicada piel del cuello,
mientras separas los labio
suspirando palabras informes,
queriendo describir sensaciones sin nombre,
en un intento por balbucear mi nombre,
boqueando como un pez fuera del agua,
agonizando de placer.

Me tomaré mi tiempo,
fluiré por tu río con calma,
entrando y saliendo
de la habitación de tu éxtasis
sin prisas,
con tu nombre todo el rato en mi boca,
con tu rostro en todo momento en mi mirada,
con el ansia voraz
de derramarme en tu interior
y desbordarme
como un océano en un continente,
sintiendo el calor ardiente en mis entrañas,
en el dolor entre mis piernas,
la intensidad estrujando todo mi cuerpo
con mano de gigante.

Déjame contemplar
tu ascensión a los cielos,
ese momento en el que los ojos se cierran
y nos dejamos llevar por una corriente invisibe e intangible,
muriendo de éxtasis para resucitar transido de placer,
con el sabor del amor en los labios,
y nuestras miradas echando chispas
al encontrarse mudas en el vacío que nos separa.



© Copyright 2014 Javier LOBO

0 comentarios:

 

Flickr Photostream

Twitter Updates

Meet The Author