LA MIRADA

LA MIRADA

Tu mirada es hipnótica,
me ciega como el cervatillo
ante las luces de los faros.

Te conviertes en mi guía en la noche,
en mi luz para la polilla,
los labios anhelados,
el cuerpo deseado.

Desearía perderme en tu cuerpo,
descubrir nuevos pecados,
nuevas formas de placer,

experimentar éxtasis extremos,
perderme en el océano de tu sudor.

Tu mirada es la incitación
al ascenso a los Cielos
o el descenso a los Infiernos,
qué mas dará,
si lo que quiero es
perderme en tu alma...

Tu cuerpo
es una promesa hecha carne,
una fórmula para olvidar
las ataduras terrenas,
deshacer los nudos opresores
del pensamiento,
libertar de sus cadenas
a los sentimientos.

Tu cuerpo es una torre de marfil
tapizada en nácar,
tu sexo es un lago
de superficies tranquilas
y profundidad insondable,
la suavidad de tus cabellos
es la jungla
en la que quiero perderme,
el látigo de seda
con el que quiero ser azotado,
el flagelo con el que quiero
que me doblegues.

Eres el pecado mortal que más deseo,
eres el amor al que no quiero faltar.
Eres la pasión que me reduce a las cenizas,
eres el deseo carnal que quiero consumar,
la droga que ansío consumir,
la costa a la que quiero arribar,
los besos en los que me quiero ahogar.



© Copyright 2014 Javier LOBO

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